martes, 14 de enero de 2014

AUTOEVALUACIÓN



Para poder hacer una evaluación de un proceso o un contenido, es imprescindible pararse a valorar lo que sabíamos antes de impartir dicho proceso y lo que sabemos a día de hoy. Si contextualizamos la oración anterior, estamos intentando evaluar nuestros 4 meses estudiando Educación del Movimiento. El objetivo principal de esta asignatura es formar a educadores competentes, que se puedan desenvolver en un ámbito profesional, a partir de todas las experiencias vividas en clase. La verdad es que yo durante varias semanas no conseguía ver reflejado ese objetivo en las actividades que realizábamos e incluso en los contenidos que veíamos en clase. Era una situación muy curiosa, pero no me terminaba de preocupar demasiado, ya que a la gran mayoría de mis compañeros les sucedía lo mismo, y de alguna forma tienes esa confianza en que poco a poco te vas a ir ubicando un poco más.
Lo que realmente pasaba es que aprendíamos conceptos a partir de los temas, o de los compañeros, pero no éramos capaces de relacionarlos o aplicarlos a nuestro ámbito, y por eso teníamos la sensación de no estar mejorando nada.
Lo que mejor me ha enseñado esta asignatura, es que debemos valorar mucho más de lo que lo hacemos las aportaciones de nuestros compañeros. Estamos acostumbrados a acudir a clase y que casi siempre la palabra la tiene únicamente el profesor, él habla, los demás escuchamos y sólo de lo que él dice nos podemos aprovechar. En cambio, durante esta asignatura se le ha dado muchas veces esa palabra al alumno, y eso ha hecho que demos mucha confianza a lo que el compañero explica, si el profesor se la da, ¿por qué nosotros no íbamos a hacerlo? A raíz de esto, me gustaría resaltar dos clases que realmente me han gustado y aportado mucho, una es la clase que elegimos un fragmento del libro de Pennac y explicábamos a nuestros compañeros el por qué de haber elegido ese y no otro, comentando brevemente todo lo que nos llamaba la atención, me gustó mucho gracias a las aportaciones de mis compañeros. Y la otra fue la primera vez que hicimos grupos puzzle, esa fue la clase en la que salí con las cosas más claras de todas las del curso, me sentía bien puesto que había sido capaz de ayudar a mis compañeros y de entender y valorar todo lo que ellos proponían, aceptando así el compromiso de pertenecer a ese determinado grupo, sabiendo que posteriormente se nos haría un examen para ver si dominamos los contenidos y si hemos trabajado bien como grupo puzzle. Todos hicimos el esfuerzo tanto individual como grupal, y me pareció muy enriquecedor.
Como ya he comentado anteriormente, me sentía un poco desorientada, y en esto tiene mucho que ver la utilización de los blogs como medio de trabajo. Sinceramente, me costó mucho creer en ello, desde el principio tenía claro que no me iba a hacer un blog y que haría mis actividades en papel como he hecho hasta ahora. Pero poco a poco me fui dando cuenta de que era mucho más práctico y que tenía muchas más posibilidades de interactuar con mis compañeros y aprender de ellos. Por lo tanto, comencé leyendo lo posts de mis compañeros, y no lo pude evitar, abrí uno. Esta propuesta es totalmente nueva, y creo que bien empleada puede dar muchos resultados, pero en cierto modo me parece un tanto peligrosa, puesto que a mucha gente no le gusta compartir sus ideas o que los demás sepan su opinión sobre cualquier tema determinado, es una decisión tan respetable como todas, pero dentro de esta  forma de llevar la asignatura se sienten en desventaja con los demás, y esto puede llevar a una gran desmotivación hacia ella.
Bajo mi punto de vista creo que todos hemos aprendido, por lo menos yo he aprendido mucho en cuanto al terreno personal, no tanto en contenidos, si no, más en cuanto a valores relacionados como valorar la opinión y trabajo de todos o darles la importancia que merecen sea cual sea su situación. Para mí, un buen educador tiene que tener claros todos estos valores e intentar siempre transmitirlos y compartirlos con sus alumnos, y que mejor forma de hacerlo que durante las clases, es una oportunidad única que debemos aprovechar.
Durante el curso he ido de menos a más y he conseguido salir de esa desorientación y  entender el por qué de esta asignatura, incluidos los objetivos del profesor, lo que me enorgullece profundamente. Como nota me pondría un 7.

sábado, 11 de enero de 2014

Por último..

Aquí os dejo una refelexión escrita por una gran amiga, Irene Garí, que lleva viviendo dos años en Texas disfrutando de una beca deportiva que le permite jugar a baoncesto en una de las mejores ligas del mundo sin dejar de lado sus estudios universitarios. Ella, como muchos otros españoles, nació en Oliva y ahora lucha por su sueño en EEUU.


"Estados Unidos: potencia económica, rascacielos, comida rápida, universidades, deporte, todo a lo grande… esas son algunas de las cosas que nos viene a la mente cuando pensamos en este país. Tengo la oportunidad de vivir esta sociedad y cultura desde primera persona, particularmente desde el punto de vista deportivo, y sin lugar a dudas, cada día esta cultura deportiva me sigue sorprendiendo.
Tener una beca deportiva en una universidad de Estados Unidos no solo implica ser bueno en tu deporte, sino destacar en tus estudios y tener unas responsabilidades que cumplir fuera del entorno deportivo-estudios. Cuando terminó la temporada pasada, mi entrenadora, una compañera de equipo y yo tuvimos que ir a un Instituto a dar una charla motivacional a los estudiantes, específicamente, a los que formaban parte de los equipo deportivos de ese “High School”.
En Estados Unidos dan mucha importancia al deporte, desde que entran al instituto, les inculcan la importancia de ello. Por eso casi todos los institutos tienen equipos de básquet tanto femenino como masculino, voleibol, fútbol, fútbol americano, tenis, atletismo, béisbol… e incluso “cheerleaders”. Comparando esta cultura con España, los españoles tenemos mucho que envidiar, en muchos de los institutos españoles solo se limitan a las 3 horas a la semana de Educación Física, sin darle a penas importancia al deporte. Puede ser que muy  pocos estén concienciados de todo lo que nos aporta y nos enseña el deporte en esta vida. Valores como el trabajo en equipo, la convivencia entre los compañeros, saber perder, saber ganar.
Cuando vi a todos los alumnos sentados con su equipación de juego respectiva del deporte que practicaban me dio mucha envidia de no haber podido vivir eso en mi país. Mi entrenadora me había dicho que les hablara de como con trabajo puedes conseguir lo que te propongas, y en mi casa conseguir una beca deportiva en otro país. Pero en ese momento que me toco hablar, no me sentí importante, no sentí que tenía que darles una charla de nada. Sentí dentro de mi impotencia por no haber podido tener yo esa oportunidad de vivir una cultura deportiva como la estadounidense. Lo que nosotros llamamos actividades extraescolares, ellos lo llaman quedarse después de las clases dos horas más para poder entrenar. Lo que nosotros le llamamos ir sábado por la tarde al cine, ellos lo llaman competir contra otros institutos. Así que no empecé contándoles mi historia, sino que les pregunté a ellos porque decidieron hacer deporte. Las chicas, era su forma de divertirse con sus amigas y querían ser como sus ídolas que veían por la televisión. Los chicos, porque sus padres habían sido deportistas importantes y quería seguir sus pasos, pero sobretodo porque amaban el deporte.
Me impactó que las chicas me dijeran que era su forma de divertirse con sus amigas, cuando en muchos países se ve algo muy masculino y cosa de hombres cuando se trata de deporte, allí lo ven como una cosa normal que las mujeres practiquen el deporte. Todo y que sigue habiendo una gran diferencia mediática y económica entre el deporte masculino y femenino refiriéndonos a términos profesionales, no creo que en muchos institutos de España las niñas hicieran como actividad extraescolar futbol. Algo que en Estados Unidos si sucede.
Era mi primera vez que iba a un instituto, los niños me lo notaron cuando termine toda mi ronda de preguntas, y mi entrenadora termino diciéndoles que esta vez una jugadora universitaria no les había dado una lección a unos jugadores de instituto, si no que estos jóvenes habían enseñado a una jugadora, la forma que ellos viven el deporte." 
Quería darle las gracias por su aportación y desearle mucha suerte en su lucha diaria. Es toda una campeona.

martes, 7 de enero de 2014

Sorpresa final

Después de este parón bloggero, quiero dedicar un poco de espacio a algo que viene interesando desde hace muchísimo tiempo, y que mejor manera que plasmarlo para concluir el blog de esta asignatura.

Desde hace muchísimos años, me llama la atención la cultura norteamericana, es interesante en muchos aspectos, pero sobre todo en el aspecto deportivo. Como todos sabemos, es por excelencia el país cuna de deportistas, y todo viene por el interés y la variedad de medios que tanto el estado como las propias universidades brindan a los jóvenes interesados en este mundo. Corre el rumor de que los mejores profesionales en el ámbito del deporte trabajan allí, y se les considera y valora en la sociedad como aquí podemos valorar la labor de un médico.
Una de las cosas que más me gusta, es que el deporte en alto rendimiento pasa por las universidades, es muy difícil que te den una oportunidad a un buen nivel de competición si no eres estudiante, y eso promociona mucho el ansia de formación académica de los jóvenes.
Obviamente no lo podemos comparar con la cultura española, ya que no es equiparable tanto en aspectos políticos, como de organización del sistema o en prioridades de este, por ello, el deporte es un buen medio para poder hacer una pequeña asemejación. Con esto no quiero decir que el deporte sea prioritario a todo lo demás, pero si reconozco que me gustaría que se le diera la importancia que este merece, y no me refuero a que se retransmitan los partidos de fútbol, ni que en el telediario pasen más de 30 minutos analizando cada una de las caras que Cristiano Ronaldo puso en el partido de anoche, me refiero a que se le diera una oportunidad a todo tipo de deportistas, que se le faciliten las cosas y pueda verse su esfuerzo reflejado, que deje de pasar lo que tenemos que ver cada día, tantísimos deportistas que no pueden cumplir sus sueños por falta de recursos económicos. Pero bueno, sí, es triste, pero algunos no tienen ni si quiera para estudiar, así que todos aquellos que al menos eso podemos hacer debemos estar muy agradecidos, por ello quiero reflejar la cultura norteamericana, que a base de becas "matan dos pájaros de un tiro", ya que si no es por medio de becas es casi imposible estudiar porque las cifras por crédito son desmesuradas, todos los interesados pondrán todo su empeño para poder cumplir sus sueños mientras estudian una carrera univesitaria.
Para complementar esto tengo preparada alguna que otra sorpresita que subiré proximamente, sed felices.